Cada 22 de marzo tiene lugar el Día Mundial del Agua, impulsado por las Naciones Unidas para concienciar acerca de la necesidad de preservar y gestionar el recurso más esencial para la vida y el planeta. La campaña de este año, #WaterforPeace, destaca el papel indispensable del agua para la prosperidad económica, ambiental y social, y subraya la necesidad de potenciar las alianzas entre actores públicos y privados para dar respuesta a las necesidades de todas las personas.
El cambio climático está aumentando la frecuencia, duración y severidad de los periodos de sequía, lo que, sumado a una mayor demanda de agua y a una gestión a veces ineficiente, causa que el recurso sea un bien cada vez más escaso. De hecho, según datos del IPCC, aproximadamente el 50% de la población mundial padece la falta severa de agua al menos durante parte del año.
En la Unión Europea, España es uno de los países más afectados por el cambio climático y la escasez del agua es un desafío importante para gran parte del territorio, especialmente el sur de España y Cataluña, que actualmente se encuentra en la sequía más grave de los últimos 70 años.
En Cetaqua, Centro Tecnológico del Agua, trabajamos por incrementar la resiliencia frente al cambio climático mediante la aplicación de modelos de economía circular. Ejemplo de ello es la fuerte apuesta por la regeneración y posterior reutilización del agua, lo que nos permite dar una segunda vida al recurso.
Un 80% de las aguas residuales que genera la sociedad vuelve al ecosistema sin haber sido tratada ni regenerada. Por ello, uno de nuestros ámbitos estratégicos se centra en el desarrollo de soluciones innovadoras que garantizan la resiliencia hídrica territorial mediante la regeneración del agua, tanto para devolverla a los ríos y acuíferos como para suministrar a la industria, a las ciudades o a la agricultura.
De este modo, aplicando al agua depurada un tratamiento adicional conseguimos una vía alternativa y complementaria a soluciones como la captación de aguas subterráneas, superficiales, los trasvases entre cuencas o la desalación, contribuyendo a la sostenibilidad del ciclo integral del agua y a preservar los ecosistemas y la biodiversidad. Aunque se considera la opción más sostenible, está aún lejos de todo su potencial. Por ello, trabajamos en proyectos en colaboración con organizaciones tanto públicas como privadas para demostrar que el agua regenerada es una alternativa viable tanto técnica como económicamente.
Para garantizar la idoneidad de las aguas regeneradas según su uso previsto, es necesario someterlas a un riguroso proceso de tratamiento adicional o complementario. Para ello, disponemos de plataformas experimentales como la de Mataró Reuse, a través de la cual demostramos la viabilidad técnica y económica de la regeneración procedente del afluente secundario de la EDAR de Mataró.
De igual modo, llevamos a cabo proyectos I+D+i para desarrollar nuevos tratamientos y tecnologías que aseguren una calidad óptima de las aguas regeneradas, demostrando la viabilidad de esta opción. Algunos ejemplos son el proyecto europeo LIFE WARRIOR, el cual coordinamos y cuyo objetivo es desarrollar y validar un esquema innovador de regeneración de agua, garantizando el cumplimiento de los estándares europeos para el riego de cultivos. Otro ejemplo es AGREEN, un proyecto experimental de agricultura regenerativa que llevamos a cabo junto a Aigües de Barcelona y la UPC, y que involucra diferentes cultivos y fuentes de agua regenerada.
En Galicia también nos involucramos en proyectos demostrativos de innovación como Ruagua, una iniciativa impulsada por el Consorcio de Aguas de Valdeorras, AquaOurense y Cetaqua dentro de la iniciativa Demos de la Fundación Cotec, financiada por IKEA. A través de Ruagua buscamos concienciar a la sociedad acerca del uso del agua regenerada y acercar este recurso hídrico alternativo a todos los sectores productivos y a los servicios públicos del municipio gallego de A Rúa de una forma integral, digital y eficiente, promoviendo la sostenibilidad y garantizando la disponibilidad de agua durante épocas de sequía.
Por otro lado, con CIGAT Circular buscamos desarrollar tratamientos avanzados para la obtención de agua reutilizable para usos urbanos y prevención de incendios.
Otra estrategia crucial en la lucha contra la escasez hídrica es la recarga gestionada de acuíferos, es decir, utilizar excedentes de agua , por ejemplo en meses húmedos, para recargar acuíferos mediante mecanismos de infiltración y poder disponer de este agua durante las épocas de sequía.
En Cetaqua contamos con una experiencia de más de 15 años desarrollando y demostrando metodologías para la gestión de la recarga de los acuíferos (en inglés MAR, Managed Aquifer Recharge).
Trabajamos en proyectos europeos de innovación como LIFE Matrix, donde recargamos acuíferos con agua regenerada. Este agua pasa por un tratamiento previo con Soluciones Basadas en la Naturaleza (en inglés NBS, Nature Based Solutions) para asegurar su calidad óptima. Este proceso es monitoreado rigurosamente mediante herramientas digitales que evalúan su impacto medioambiental y sanitario. De este modo, se pretende incrementar un 15% los recursos hídricos subterráneos disponibles en el acuífero receptor.
Con MARCLAIMED además de implantar la recarga con agua regenerada en la cuenca del Llobregat y realizar pilotos de recarga con fuentes alternativas de agua en Portugal y Holanda, estamos trabajando en el desarrollo de una herramienta Integrada de Apoyo a la Decisión (IDST, por sus siglas en inglés) dirigida a instituciones públicas para abordar el desafío de integrar la Recarga Gestionada de Acuíferos con recursos hídricos alternativos en planes hidrológicos y de sequía como medida estructural para mitigar la escasez de agua en Europa.
Todos estos avances son posibles gracias a las alianzas y la colaboración público-privada como garantes para contribuir al progreso económico, social y medioambiental, así como generar valor para toda la sociedad, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.